El montaje realizado para la celebración del Solemne Quinario recuerda a aquellos aparatos de culto de finales del siglo XIX o principios del XX, con la inclusión de múltiples elementos con el fin de promover un mensaje evangélico, como así rezamos en el Vía Crucis: «Porque por tu Santa Cruz, redimiste al Mundo».
De esta forma, observamos a Nuestro Sagrado Titular, Nuestro Padre Jesús de la Salud y Buen Viaje, en el centro de la composición, ya que a través de la Imagen llegamos a Dios, rodeándose por un centenar de candeleros, así como elementos barrocos como el paño bordado del dosel, las flores de talco (originales de mediados de 1800) y un Sagrario, igualmente de dicha centuria.
Nuestro Titular se encuentra ataviado con «la clámide púrpura» obra realizada por el bordador Joaquín Salcedo, las potencias de plata sobredorada de Manuel Seco Velasco (1954), cordón de oro, portando la corona de espinas y caña, como atributos propios de su iconografía.
Exorno floral que componen el altar: Orquideas vanda, Jacintos, Freesias, Verónicas, Statice, Solidago y Clavellinas.
